Amor de Dios

"Porque el amor de Cristo nos apremia al pensar que, si uno murió por todos, todos por tanto murieron. Y murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos" (2Cor 5,14-15)

Todos conocemos muy bien esta cita bíblica y seguramente ella misma sería nuestra "gotita de espiritualidad del día de hoy. Sin embargo, San Pablo no podía llegar a este nivel de introspección, para darse cuenta que no es sólo a nosotros los que nos urge el amor de Cristo sino que es el Amor de Cristo al que le urge ser entregado. 

La gotita de espiritualidad de hoy es que nos demos cuenta lo que hace la presencia de Dios en nuestras vidas y que quizá no percibimos o no nos percatamos. 

Que las circunstancias transitorias en las que vivimos "no nos separen del amor de Dios".