Jaculatoria
Amado Nazareno de mi Vida:
En tu Compasión levántame, corrígeme,
perdóname, renuévame, libérame.
No dejes que de ti me aparte.
Antes bien, a tu lado recíbeme,
ahora y para siempre.
Amén
Yerko Reyes Benavides
Con palmas y ramosAmén
Jesús amado
salimos hoy al encuentro
de tu amor ofrecido
en el altar de tu pecho
por nosotros traspasado.
¡Hosanna!
clamor de gozo y alegría
al sentir la cercanía
de tu paso decido
por nuestro vivir herido
que te lleva al Calvario
donde ha de morir contigo
nuestro pecado.
¡Hosanna!
al Dios que llaga;
Bendito sea
el que en su alma
la pena allega
de naturaleza caída
en bondad creada,
que en el ara de su entrega
ahora es reconciliada.
Hosanna
es el sentir
de nuestro existir
enamorado
en el Dios crucificado
que sanó nuestro ser agraviado
y resucitado
la eternidad a vaciado
en este corazón
a ti ahora consagrado.
¡Hosanna!
en todo el firmamento
seas Señor aclamado;
¡hosanna, hosanna!
mi bien Amado
sea en mí, tu nombre exaltado,
ahora y por siempre
y eternamente.
El cielo y la tierra se acabarán y con ellos cualquier pena, pero mi amor no pasará, y te he amado desde mi plenitud para que estés conmigo por toda la eternidad; así que mientras todo pasa, haz que pase mi amor en ti.
Te heces tan cercana a nosotros, nos ofreces tus maternales cuidados y compartes nuestra caminar y en la fragilidad de nuestra humana condición nos tiendes tu mano amorosa.Hazte sentir constante en este querer que la fe mueve por servir y amar en todo a Dios.Enséñeme Madre mía, al igual que tú a dar un Sí rotundo al llamado de Dios de cada día.Acógeme en tu regazo, reconforta mi alma agotada, con la caricia suave de tus consuelos.Con la maternal ternura de tus sentimientos, toca mi corazón; hazlo dócil a la voz del Señor.Ayúdame, Dulce Niña mía, a nos cerrar mis pensamientos a los imposibles que Dios propone.Dame un espíritu abierto, valiente y decido, que en todo confíe en en la Sabiduría de Dios que sobrepasa mi entendimiento.Por tu intercesión y con tu presencia amorosa propicia en mi al Hijo de tus entrañas, para que llevado de tu mano "se haga en mi, como se hizo en ti, según su Palabra.
Te miroy te admiromis ojos de ti no apartomi alma deja su postraciónlate de nuevo mi corazónArder en mi interiorun fuego que me atrapa,me destruye y me consumeme quema y me renueva.Cuando pienso en tise estremece todo en mino queda lugar para fingirya no puedo mentirtuyo es mi existirpara ti es mi vivir.Ven a mi, Amado,no dilates tus amoresmi espíritu está clamandono hay más temorestuyo seré eternamentemío serás para siempre.
Abrázame Virgen María, recíbeme en tu regazo, a tus entrañas de Madre acércame tan íntimo, que el latir de tu corazón se sienta en mi pecho.
AménMi alma en tu alma se estremezca y aparezca el dulce susurro de tu voz que pronuncia delicado mi nombre; decidida estés hoy como ayer a unirlo en amor al del Amado.Suave es la caricia de tus labios con la que bendices mi frente y mi atención reclamas con sutil firmeza, me muestras el camino, mas no esperas, me tomas de la mano, caminas a mi lado.Envuélveme en tu manto, cubierto por tu amor de Madre en él quede, y ya seguro en ti, seas en mí la que anime cada día a renovarme en entrega, haciéndome en todo y como tú, humilde siervo del Señor.Muévame tu corazón en mi corazón, Dulce Niña mía, que en la ternura de tus más puros sentimientos, mis buenas intenciones se conviertan en nobles acciones que sean el reflejo de tu amor incondicional, que a mi alma tiene cautiva.
AménEn esta hora, Dios altísimo, a ti me acerco, es la pena y mi aflicción lo que en esta ocasión a ti me lleva.Señor, son días de prueba, no te reclamo, al contrario, a ti me acojo, en el mundo y en la expiación no quiero verme de ti desamparado.A mi corazón lo siento desgarrado, en él se ha anidado el desconsuelo y el valor me ha abandonado y todo en mí, por el temor se ve sofocado.Mi alma se baña en el duelo, lágrimas se dejan caer, no las puedo retener; la pena me embarga y sólo en ti encuentro sosiego.Del calor de tu pecho, amado Señor, no me dejes lejos, sólo en él encuentro el descanso y el consuelo anhelado.Mi buen Dios, en esta hora de desvelo, sostén mi esperanza entre tus dedos, pues mi fe desvanece y la confianza se estremece, no permitas que confundido en el dolor de ti me aleje.En tiempos de clamor, un favor te pido: no dejes de escuchar mi oración, se tú mi compañía, la fuerza que a mi debilidad le dé seguridad, para buscar, también en esta hora, tu sagrada voluntad.
AménNo hay abismo tan profundo, ni árido desierto que puada apartar tu ternura y compasión de mi alma sedienta de tus bondadesNo hay yugo tan pesado que me haga tropezar, ni caída tan intensa que al suelo me haga besar, que me aleje de tu mano compasiva, que me tiendes para levantarme una vez más.No hay leño que destroce mi espalda, ni corona que hiera mi cabeza, que aleje mi devastado estado de las gracias de tu costado traspaso en amor dado.No, no hay condición en este mundo que de ti mi aparte, pues eres Amado, la fuerza que me impulsa, la gracia que me levanta, la bondad que me alcanza, la luz que me guía.Es en ti Señor que me sostengo, camino y no me detengo, venzo las dificultades y me enfrento al tiempo que detiene el encuentro de mis anhelos y tus amores.
Que Dios Padre amoroso se muestre siempre bondadoso con todos y cada uno de ustedes.Sea el mismo Jesucristo, Señor nuestro, quien haga sentir su gracia y su misericordia en la vida de todos ustedes.En los momentos de tristeza, desolación o soledad sea Cristo su consuelo, un refugio en la tribulación y abrazo sentido en las alegrías.Que el Espíritu Santo pose su mirada en ustedes y esté siempre atento a los anhelos que atesoran sus corazones.Y bien de día o de noche, en vigilia o en reposo y en el quehacer de cada día no les falte su compañía y su santa bendición.
Me acerco a ti a hurtadillasAmén
llamar la atención no quiero
el silencio es mi cómplice
de pretender querer quedarme
solo por un instante
con la gracia desbordante
que de tu pecho brota exultante.
Ante ti
y sólo delante de ti
mis rodillas doblo,
mi orgullo y vanidad hiero
para abrir lugar en mi interior
y entres en posesión
de mi alma y corazón.
Te busco con tesón
ya no hay más temor
es el latir de tu corazón
mi inspiración,
luz inagotable
que vence la oscuridad indeseable
que de tu amor lejos me mantiene.
Doblo mis rodillas
y en silencio quedo,
delante estás en Pan
eres alimento
de mi vida el sustento
reparas mis fuerzas,
me amas y eso basta.
En Ocasión a los 25 años de Sacerdocio
AménAyúdame, Jesús, a mantener en mi pecho hasta el fin de la vida, cada día, el sentir enamorado del día que por primera vez te contemplé de mi mano haciéndote presente, vivo y realmente en el pan que por ti aquella tarde consagré.Ayúdame, Señor, a nunca bajar avergonzado la mirada, relegando a mi ser la contemplación de tu divinidad, en la humildad del trozo de pan, que a mi humanidad le concedes presentar como ofrenda de tu amor.Ayúdame, Bien mío, a conservar vivo en mi corazón el querer estar a tu lado sin reparo; sin más dilación, disipa las escusas y el celo de pastor, oveja soy del rebaño que apacientas en tu corazón.Ayúdame, Señor, a no alejarme de ti entre la gente o desvanecerme en sus necesidades, pretendiendo hacerte presente, se tú mi urgencia y el fuego que me quema, la virtud de mi consagración: perdiéndome en tu corazón me encontraré sirviéndote en amor.Ayúdame, Amado, a mantener firme la promesa que un día a ti te hice, de ser para ti y sólo para ti, en cada aliento, en todo suspiro; tuyo cada día, todos los días, hasta el día en que lleves a plenitud la obra buena que en mi comenzaste.
Sé lo que quiero
y en ello la vida entrego,
es convincente;
lo sé
estoy consciente
y me aferro a este deseo,
en mi está el anhelo
que me apremia,
me levanta
y al cielo me exalta.
Lo que no sé,
es si lo que quiero
es lo que puedo
o a lo que me aferro;
pues de momento
es lo que alcanzo,
mientras persevero
y hago lo que puedo
para llega a lo quiero.
Que en este querer que quiero
no me falte el aliento
que efímero llega con el viento,
que soplas de tu boca
suave briza que me toca,
para que busque lo que anhelas
y quiera lo que quieras.