martes, 15 de mayo de 2018

El Lirio, Corona Perfecta para Reina y Madre: Hija de Dios

Con Flores a María
vayamos todos a su encuentro

El Lirio

Los lirios son flores exóticas, resistentes y con una fragancia que enamora. Y, por si fuera poco, es una flor cargada de simbolismo. Existe una amplia variedad de colores, formas y tamaños. Es fácil encontrar lirios en colores blanco, rosa, rojo, amarillo, morado o naranja, ya sea con rayas o con puntos. En cuanto a su tamaño, el diámetro de la flor abarca desde los 7 a los 25 centímetros.

Los lirios no solo son diversos en cuanto a color, forma y tamaño, sino que también lo son en cuanto a su lugar de origen. Se pueden encontrar lirios salvajes en Corea, Japón y ciertas partes de Rusia, pero también cerca de Ecuador o de India. En Europa, el lirio crece en zonas del Caúcaso, los Balcanes, Grecia, Polonia, los Alpes o los Pirineos. También se pueden encontrar en gran parte de Estados Unidos, a excepción de la zona del sudoeste. Se trata, verdaderamente, de una flor de mundo.

Significado del Lirio y sus simbolismos

Los lirios son un tipo de flores que se conocen desde la antigüedad, para ser más específicos desde la antigua Grecia. De acuerdo con la leyenda, los lirios son un brote en veneración a la leche de la diosa Hera. En lo que es la tradición cristiana los lirios simbolizan la pureza y virginidad de la Virgen María.

 Los cristianos sostienen el lirio como símbolo de la castidad, la inocencia, la pureza y la piedad. En el arte paleocristiano el lirio blanco es el símbolo de la "Madonna" como la flor y se asocia con la virgen María. Con sus tres pétalos, el lirio es a menudo considerado como un símbolo de la trinidad, la celebración de la representación de las tres virtudes: la caridad, la esperanza y la fe.

En los sueños simbólicos el lirio se ocupa de la santidad del corazón, la elegancia y la necesidad de claridad o de limpieza. Si el soñador está mirando un lirio es un mensaje de aliento y posibilidades de éxito. También es una señal de que estamos buscando descanso, paz y tranquilidad.

Otros significados que se le atribuyen a estas hermosas flores son:
  • Feminidad: Los griegos y los romanos entregaban coronas de lirios a las mujeres con la intención de desearles una vida esperanzadora y fructífera.
  • Amor: En la época victoriana los amantes entregaban lirios a las mujeres como señal de amor.
  • Pureza: en las bodas, los lirios blancos adquieren un significado de pureza.
  • Momento de transición: El aspecto sereno y puro del lirio expresa deseos de superación en momentos de pérdida y duelo.
En cuanto al significado de los lirios según su color, también existen diferentes interpretaciones. Si quieres enviar un ramo de flores con lirios, te gustará saber lo que significa cada uno de ellos según el color:  
  • Lirios blancos: simbolizan la inocencia y la pureza. Enviar un ramo de lirios blancos es común para expresar buena intención y los mejores deseos hacia otra persona. 
  • Lirios amarillos: vinculados a la alegría, la felicidad. Regalar un ramo de lirios amarillos es también una buena opción si quieres expresar lealtad. 
  • Lirios naranjas: energía, creatividad, ánimo y positivismo. También simbolizan amor y pasión ardiente. Envía un ramo de lirios naranjas cuando quieras animar a alguien.
  • Lirios rojos: son el reflejo del amor y de la pasión. Es un regalo perfecto para enviar a tu pareja.  
  • Lirios rosas: asociado a la bondad, a la ingenuidad y a la ternura y también a la juventud. 

Propósito y Compromiso 


No se corona a quien no hace mérito para portar la corona. Y este amor cristiano que vivimos nos invita a buscar siempre y en todo momento las gracias de Dios para merecer ser coronados con Cristo de gloria, gracia y virtud. 

Nuestro propósito y compromiso para este día, es vencer toda tentación que nos lleva al conformismo religioso y a la resignación espiritual. Hemos de estar en disposición constante de fortalecer la vivencia evangélica del amor en nuestro corazón. 

Esta necesidad de amar a la manera de Cristo comienza con la intención de recuperar la bondad natural y la inocencia originaria de nuestro corazón. Para ello, no podemos quedarnos atascados en lo meramente devocional. 

Busquemos las maneras de aprender a amar no más, sino mejor. Y una de estas maneras pasa por la Oración, pero también por la Formación. Busquemos los medios y las maneras de conseguir este crecimiento interior.

Comencemos hoy mismo, consiguiendo un libro de lectura Espiritual. Los hay muchos en librerías cercanas, pero también podemos hacer uso del amplio catálogo virtual que está a nuestra disposición. No tenemos escusa y no pongamos más pretextos; para fortalecer nuestra fe a través del aprendizaje de nuevos contenidos.

Yerko Reyes Benavides

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