Con Flore a María
Vayamos todos a su Maternal Encuentro
La Fresía
Se conocen
pocas cosas sobre esta flor. Se sabe que proviene de África del Sur, pero no se
sabe cuándo y cómo sucedió su expansión al resto del mundo. Quizá por esta
razón la Fresia entre otros signos es símbolo del “misterio”.
Entre las
características la Fresia, son flores delicadas que se encuentran en muchos
colores. Se caracteriza por su exquisito aroma y larga vida.
Las
flores de Fresia son una de las más fragantes, su perfume tiene una luz, un
aroma dulce similar al jabón floral. Los colores de la Fresia son el naranja,
rojo, lavanda, purpura, malvas, oro amarillas, bicolores, mas el característico,
el color que la tipifica es el blanco.
Cuenta la
Leyenda
Hay una
leyenda en relación a la Fresia que habla de Antinea, nacida de la unión de los
seres humanos y las criaturas del bosque y su compañero de juegos, el fauno
Yhorus y un viaje para descubrir el maravilloso mundo de los bosques de los
Incendios de Jade.
Antes de
partir en este viaje, Yhorus le da una guirnalda de Fresia blanca, como un
símbolo de la pureza de la mente y el poder de la pasión, con el deseo de
disolver, con su danza encantada, la tristeza y la melancolía de los que
sufren.
Antinea
se fue, entrando en el bosque del padre elfo, se radicó. Allá fue descubriendo
sus poderes y permanecieron libres para siempre.
Significado
En esta flor el simbolismo es tan rico como la
variedad de sus colores y, como en otras flores el significado es múltiple y
variado. Sin embargo es el que más destaca entre todos es el de representar la
meditación y la contemplación. La Fresia invita a las persona a la reflexión,
mostrando lo importante que es para el ser tener ese momento a solas para
pensar, reflexionar e incluso orar.
Por otra parte, en el lenguaje de las flores la
Fresia significa “confianza e inocencia”. Comúnmente es utilizada como flor
decorativa en las fiestas de niños sobre todo en el bautismo.
También, se cree que la Fresia tiene la capacidad
de proporcionar esperanza y valor para afrontar los malos tiempos.
Propósito y Compromiso
Vamos llegando al final de nuestro recorrido. Hemos ido recogiendo
en el camino una variedad de hermosas flores, con la intención de ponerlas con
admiración y amor en el altar que honra a la siempre, Madre de Dios y Madre nuestra,
la Virgen María.
La Fresía es una de esas flores que por su sencilla y sutil
presencia destaca entre otras de mayor prestancia.
Siendo su cualidad la humilde belleza, no pasa desapercibida
delante de nuestros ojos y nos habla de elegancia y suavidad. Son dos cualidades
espirituales fruto de la práctica consecuente de la meditación y la
contemplación, que junto a la oración conforman un precioso trinomio que
redunda en abundantes beneficios espirituales.
Por tanto, si todavía no lo hemos planteado, que seguramente
si nos habremos adelantado en hacerlo, ha llegado el momento de pasar de la
intención a la realización y por ello, ahora que este Itinerario mariana llega
a su fin, el fruto más relevante del trayecto realizado haya sido el adquirir el
hábito de la Meditación.
Si hemos sido consecuentes, a este punto, no abandonares el
tiempo que ya hemos dedicado a diario a realzar los “tres momentos espirituales”:
Meditación de la Palabra de Dios, Oración y Contemplación, y el realizar una
acción espiritual concreta en el día que redunde en provecho para nuestros hermanos
y nosotros mismo.
Propósito: continuar haciendo camino espiritual. Compromiso:
no abandonar lo que hemos alcanzado.
Maravillosa flor para ti, Nuestra Patrona: Madre de la Contemplación.
A tu altar dejamos la Fresia como ofrenda de nuestro amor por ti, ya que a ti, de hoy en adelante representa. Esta flor es el símbolo de la confianza que ponemos a tu mística intercesión.
Cuídanos Madre del Amor Hermosos, Dulce Muchacha de Nazaret, tú que a Dios Padre te consagraste y tu vida pusiste en sus manos, ayúdanos también a realizar la misión de bondad, compasión y misericordia que Dios nos ha asignado como hijos suyos; Tú la “hija predilecta” del amor de Dios.
Que, como tú en la meditación y la oración encontremos la voz de Dios que revele el camino de nuestro caminar en el mundo, palabra que es luz para nuestros pasos.
Tuyos somos, a ti nos consagramos y como tú, los misterios de Dios contemplamos en silencio y, guardados en nuestro corazón van siendo fuerza y gracia que nos llevan en certeros pasos ante la amorosa presencia de Dios.
Amén
Yerko Reyes Benavides
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